Muisne: Que la solidaridad no cese
Por Karla Calapaqui @ Dayumaec -Yo hacía unos ricos panes, ¿cierto?, le pregunta a su vecino de la tricimoto uno de los habitantes de Muisne, damnificado por el terremoto… -Sí, riquísimos. Él ríe, pero con una sonrisa que sabe a nostalgia y amargura. Tomando un poco de aliento, don Segundo dice: -Ahí en el agua está mi horno, está mi vida… Y pierde su mirada en sus maderas y en lo poco que pudo rescatar. -Ahora tengo que irme donde mi hija, me duele porque éste es mi hogar y me toca empezar de cero. ¿Qué voy a hacer?, se pregunta. Un profesor de la escuela de la zona, se levanta a nuestro paso y reclama: -No hemos recibido ayuda, Muisne también es Ecuador. La gente se está yendo, pero yo me quedo, dice, el maestro que por años ha formado cientos de niños muisneños.