Para defender el Yasuni no se necesita permiso
Para defender el Yasuni no se necesita permiso, se lo hace en las calles con zapateadas, con pintadas, con carteles, con veladas y cualquier forma creativa que los jóvenes que están a la vanguardia de este sueño de defender la vida, encuentran para expresarse.
Queremos
ser escuchados, queremos que se tome en cuenta la opinión del que
piensa diferente, que nuestra voz tenga un espacio y no se nos dé la
espalda, queremos participar en la toma de decisiones, no queremos
imposiciones, queremos democracia no simulación, queremos libertad
no persecución.
En
el Yasunì nos encontramos todos, su defensa no es propiedad de
ninguna persona u organización, es derecho y obligación de todos,
es cuestión de dignidad, de supervivencia, de vida, de solidaridad,
de humanidad, de respeto.
Hoy
es un crimen ser honesto, tener sueños e ideales. No pensar como el
gobierno se castiga con el código penal; se condena a quienes
deciden no callar y exigir sus derechos, se lincha mediáticamente
con recursos del Estado a los incómodos, a los indignados. Como en
las épocas más oscuras de la historia, los que tienen el poder se
creen de una raza superior, de un olor superior, de una mente
superior que no se equivoca y lo puede todo por sobre todos, y a los
que nos quedamos abajo se nos resta, limita y desconocen nuestros
derechos y en el caso de los pueblos no contactados
(Tagaeri-Taromenane), desconocen su existencia como primer paso para
el despojo y posterior etnocidio.
En
el Yasunì nos encontramos todos, los ecologistas infantiles, los
indios locos, los LGBT, los “tirapiedras”, los cuatro pelagatos,
los izquierdistas, rockeros, anarquistas, artistas, cantantes,
pintores, profesionales, desempleados, todo aquel que ame la vida,
pero no como un slogan sino como un principio.
El
15 de Agosto, cuando Rafael Correa dio
a conocer su plan A, que siempre fue el B, repitió 14
veces la palabra jóvenes en su discurso, como queriéndonos
envolver, engañar, apaciguar, como diciéndonos “bien
que protesten, pero no contra mi, sino contra el mundo que nos ha
fallado”.
La manipulación ha sido un arma gubernamental para la imposición
ideológica, que nos ha bloqueado y dividido, lastima que el Yasuni
es Pandora,
de Avatar, y la conciencia nos llama a unirnos en la diversidad, a
juntar nuestros reclamos y defender la mayor riqueza que no se
encuentra bajo tierra, sino sobre ella.
El
debate abierto, sincero no cabe en la cabeza presidencial, a eso le
teme, a que seres comunes y corrientes cuestionen sus políticas con
argumentos, con respeto y con pasión. Rafael Correa, le teme a la
sinceridad y la realidad que encuentra del otro lado y se escuda con
la SENACOM y la SENAIN.
Con
el millonario gasto en estos organismos de persecución, en
propaganda y otras políticas bien pensadas, turismo, nacionalización
de telefónicas, cobro de impuestos a grandes evasores, etc., bien se
podría salvar el Yasunì sin esfuerzo, solo es parte de una decisión
política coherente que ya no tiene cabida en el gobierno. El
argumento de que el petróleo del Yasuní nos sacará de la pobreza
se cae cuando, en retrospectiva vemos 40 años de extracción de
petrolera, solo olvido, contaminación y más pobreza y, en 6 años
de gobierno que ha contado con más de 150 mil millones, la pobreza
maquillada de bonos, asistencialismo, populismo y despilfarro.
Los
jóvenes no estamos cometiendo ningún delito al defender la
naturaleza, la vida, lo garantiza la propia Constitución, este es un
tema que nos compete a todxs, y en uso de nuestros derechos nos
sumamos al clamor de la mayoría de la población que quiere ser
consultada, que quiere decidir sobre este asunto de interés nacional
como es el Yasuní Reserva Mundial de Biosfera, reconocido por la
UNESCO,
esta
es la verdadera riqueza no para nosotros, sino para las futuras
generaciones.
¿Por qué el miedo del presidente Correa a que se convoque a una
consulta popular?
Los
jóvenes discriminados por ser jóvenes, rebeldes, infantiles, por
tener una filiación política distinta al régimen, por vestir
diferente, por ponerla la cara a la vida, no nos amedrenta el
fotógrafo personal asignado gentilmente por la SENAIN, ni las
palabras injustas y hostiles del Presidente en su sabatina, seguimos
luchando por nuestros sueños gigantes, recuperando las calles que
son nuestras, creando conciencia, “caminando y cantando y siguiendo
la canción, somos todos iguales, brazos enganchados o no, vamos
ahora, que esperar no es saber, quien sabe lo hace ahora no espera
acontecer ”.
Yasuni
Resiste!
Karla
Calapaqui
@karlacrisc
0995696353
Excelente editorial, con ese ánimo aquí estamos todos los que amamos y pensamos en la vida, basta de engaños y manipulaciones, la doble cara y la doble moral, por fin se los pondrá al descubierto, y el mundo les señalará con el dedo a estos pseudo revolucionarios
ResponderEliminarMuy buen editorial ojal{a todos perdamos el miedo a la opresión y si tenemos que luchar con nuestra vida por defender esta importante riqueza natural así lo haremos, se engaña al pais que este proyecto mitigará la pobreza en la amazonía, cuando en realidad con mas de 30 años de extracción no se han solucionado las necesidades básicas de nuestra amazonía y seguro pasaron factura en especial a Sucumbíos: cáncer, desnutrición,contaminación en aire, suelo y agua.
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