8 años de violencia contra las mujeres.
En la
Constitución de Montecristi se plasmaron derechos, que por años se reclamaron
en las calles. Incluirlos no fue dádiva de nadie, sino fruto de la movilización
constante de diversos sectores sociales. La lucha de los movimientos de mujeres
permitió plasmar conquistas.
Después
de 8 años del gobierno de la “revolución ciudadana” varios han sido los
retrocesos en derechos, pero particularmente los de las mujeres ecuatorianas se
han visto afectados, regresando en algunos casos décadas.
La
actitud misoginia, patriarcal y discriminatorioa se ha reflejado en dichos y
hechos, principalmente del presidente de la República. “Gordita horrorosa,
cállate majadera, coloradita, mediocre, mafiosa, tirapiedras, qué minifaldas!,
qué piernas!... etc” son algunas de las palabras para referirse a periodistas,
maestras, dirigentes sociales, opositoras políticas y ciudadanas en general que
han cuestionado a su gobierno.
En 2007
la prefecta de Orellana Guadalupe Llori, fue encarcelada bajo el delito de
“sabotaje y terrorismo” y desde ahí no ha parado. La represión a las mujeres
campesinas de Molleturo en el Azuay, en defensa de la vida y contra la mineria;
el despido intempestivo de servidores públicos, entre los que constan mujeres
embarazadas, la criminalización de la protesta que ha dejado cientos de hombres
y mujeres judicializadas, como el caso de Abigail y Cristina que pasaron un año
presas injustamente y Fadua que se encontraba embarazada bajo prisión
domiciliaria, del caso los 10 de Luluncoto; la condena a la maestra Mery
Zamora, ex presidenta de la UNE, por el delito de “terrorismo”, el acoso
político, las bajezas y amenazas en su contra, la han convertido en un
referente de la resistencia social. En estas mismas condiciones la maestra
Rosaura Bastidas condenada a tres años de prisión por sabotaje y terrorismo. El
linchamiento mediático y acoso político gubernamental contra las mujeres que
disienten con el régimen es ya política de Estado.
Las
leyes y políticas impuestas en el país, han afectado a los ecuatorianos pero
doblemente a las mujeres. Por ejemplo en el caso de los docentes, el cambio de
la jornada laboral a 40 horas ha perjudicado al magisterio ecuatoriano,
teniendo en cuenta algunos datos, este sector es eminentemente femenino con el
70 % de mujeres, de las cuales en un 47% son jefas de hogar. Con el cambio de
jornada se ha provocado una reducción del salario y por ende una sobre
explotación laboral poniendo su trabajo intelectual a la misma condición del
trabajo manual, alterando su organización en el hogar, el cuidado de sus hijos
etc. Sin contar con las enfermedades laborales tanto físicas como mentales
producto de acciones y políticas impuestas desde el Ministerio de Educación, un
patrono que acosa, persigue, sanciona, impide la organización gremial,
criminaliza, no solo a maestros, sino a estudiantes y autoridades.
Tres
mujeres encabezan la Asamblea Nacional. Si
bien, el derecho a la paridad está garantizado en la Constitución en su art.
65, fruto de la lucha de años de las mujeres, el gobierno las utiliza como
fichas de ajedrez o como adorno, sin la capacidad de decidir o llevar bajo el
abrazo una agenda de género.
Para
muestra un botón, cuando se debatía el Código Integral Penal (COIP),
asambleístas del oficialismo, tibiamente expresaron la necesidad de
despenalizar el aborto por violación, pero su atrevimiento les salió caro, el
presidente Correa les hizo un escarnio público y fueron sancionadas. Agacharon la cabeza.
El COIP fue aprobado por la mayoría de asambleístas
de gobierno, está en vigencia desde agosto de 2014, la Violencia contra la
Mujer ahora está establecida como “Delitos de violencia intrafamiliar”, dejando
de lado el reconocimiento de una violencia específica contra las mujeres y
contrariando lo que establece la Constitución. Las mujeres víctimas de
violencia de género estarían expuestas a un proceso de revictimización, se da
espacio para beneficiar al agresor, no hay medidas oportunas para proteger la
vida de las mujeres.
En el ámbito de la Justicia, las Comisarias de la
Mujer se eliminaron y en su reemplazo crearon las Unidades de Violencia contra
la Mujer y Familia (UVMF), pregunto, cuál es la celeridad y capacidad con la
que actúa el personal a cargo?
Cuando se aprobó el Código Monetario y Financiero se
derogó la Ley de Maternidad Gratuita y Atención a la Infancia, en los hechos la
dejó sin financiamiento, vulnerando derechos de mujeres y niños, y una serie de
medidas de protección para la mujer.
El Plan
Familia del Presidente.
En el 2012 se creó la Estrategia Nacional
Intersectorial de Planificación Familiar Enipla con el fin de implementar
acciones para reducir el índice de embarazo adolescente que entre 2001 y 2010
presentaba cifras alarmantes: 74%.
Pero a Rafael se le ocurrió imponer el denominado
PLAN FAMILIA cuyo objetivo es: “Enseñar valores a los adolescentes para que
decidan retrasar el inicio de su vida sexual”.
Este
plan fue elaborado con el presidente Rafael Correa, el ministro de Educación y
apoyado por el Ministro del Interior, así lo dijo Mónica Hernández su
directora. NO ha sido socializado con los actores sociales, violenta derechos
sexuales y reproductivos establecidos en la Constitución de la República.
Mónica Hernández identificada con el OpusDEi, en el
mencionado Plan Familia sataniza la sexualidad. Hernández manifestó en una
entrevista que “Lo que quiero es lograr
que los adolescentes digan ahí está el canguil, pero no lo voy a comer. Que
digan, yo sé que tengo la posibilidad de ponerme un implante, pero no quiero
utilizarlo.”
*Y a esto como le llamamos? Faltó el cinturón de
castidad!
A renglón seguido: “Los adolescentes tuvieron a la
mano, a discreción, los preservativos o cualquier otro método anticonceptivo”.
Se escandaliza por repartir preservativos y hablar sin misterios de la
sexualidad, y lo peor que es el gobierno quien impulsa la aplicación de este
plan, que mira a los jóvenes como objetos de protección y no sujetos de
derechos. Según nuestra constitución los jóvenes desde los 16 años ya pueden
votar en elecciones, entonces por qué no se los considera capaces de tomar
decisiones informadas y sin misterios respecto de su sexualidad?
Y es que en el enlace ciudadano No. 413 Rafael
propuso la abstinencia para reducir el embarazo adolescente, así como la
sexualidad en valores.
Hernández ya lo dijo: ‘Daremos mucho énfasis a la
abstinencia’.
*Resumen: conservadurismo duro y puro.
Se están olvidando, sino hace rato, el carácter laico
del Estado, amenazado al permitir la imposición de criterios de carácter
religioso y moral, y sin ningún sustento científico.
Se requiere educar con información científica,
objetiva, oportuna alejada de prejuicios y discriminación, basada en derechos
que pueda ayudar a los jóvenes a iniciar su vida sexual si así lo desean.
Dicen que van a fortalecer a la familia para evitar
embarazos adolescentes?
Según estadísticas oficiales, 1 de cada 10 niñas
entre 5 a 6 años de edad han sufrido violencia sexual. El 24% de niñas, niños y
adolescentes han experimentado violencia física en su entorno familiar.
Este informe de la Fiscalía General del Estado señaló
que 961 niñas menores de catorce años reportaron haber sido violadas en 2014.
La mayoría son violadas en sus casas por sus parientes y amigos de su familia.
La Fiscalía señaló que en el 2014 se obtuvieron 671 sentencias por violación a
mujeres y el 98% de estas ocurrieron en el círculo familiar, principalmente a
niñas, niños, y personas con discapacidad. Solo el 2% de las violaciones
ocurren fuera de los hogares y son perpetradas por desconocidos. Además la Fiscalía receptó 271 denuncias de
violaciones a niñas en el ámbito educativo en el 2014.
Al parecer esta estrategia desconoce estos datos y al
hacerlo estaría invisibilizando las violaciones y agresiones sexuales de niños,
niñas y adolescentes que sufren en el entorno familiar.
La homofóbia no se hace esperar en este plan que excluye la
diversidad de familias que se pueden conformar, discrimina a la población
GLTBI, es que como dice Rafael: "Agendas
abortistas, matrimonio gay, feminismo extremo esos no son los valores del
pueblo ecuatoriano".¿?
Se dejó atrás ENIPLA a pesar de que se ha reconocido
avances por el mismo Rafael Correa, para imponer un plan familia oscurantista
en pleno siglo XXI, que sataniza hasta el placer porque “el coito solo es para
procrear”, y pues sentir placer ya casi casi es pecado en el país!
El pasado 16 de marzo el
Secretario Jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, Mano Derecha de Rafael,
expresó en una entrevista ‘El Estado debe
enseñar a la mujer a postergar su vida sexual’, es increíble como en una
sola frase se resume la misoginia, el desprecio por las mujeres, nos considera
incapaces de tomar decisiones y claro somos las mujeres las responsables exclusivas de embarazarnos;
pone en evidencia el carácter patriarcal, prejuicioso y discriminatorio del
gobierno, que no basta con reducir derechos, sino que pretende meter las
narices del Estado en nuestra intimidad para tener control de nuestros cuerpos,
tiempos y decisiones.
Pero no bastó con eso, es que las mujeres somos las
culpables según Alexis Mera: “(...) las
mujeres no se valoran adecuadamente, porque se dejan violentar”. El Secretario Jurídico de la Presidencia invisibiliza
a propósito, el complejo sistema de explotación, dominación y opresión que justifica la violencia hacia
las mujeres, resulta que las mujeres no nos valoramos o no vestimos como debe
de ser, o no nos comportamos bien, pero el Estado nos va a ensañar a hacerlo.
El Estado debería preocuparse por garantizar nuestros
derechos y no tutelar nuestras vidas y tatuar nuestros cuerpos con las
concepciones y valores de Rafael.
Se articulan una serie de medidas que dicen estar
encaminadas a favor de las mujeres, pero solo reafirman el sistema patriarcal
machista y discriminatorio: retrocedemos en derechos.
Aborto y
criminalización
Antes claro que estaba penalizado, pero es hoy con el
COIP en este gobierno, que se ha hecho efectiva la prisión y condena a mujeres
que abortaron. Según Revista Plan V,
existen “59 casos de mujeres judicializadas por aborto”; en su mayoría
mujeres pobres que han recurrido a lugares clandestinos, cuando es el Estado
que debería brindar atención médica oportuna precautelando los derechos y la
vida de la mujer.
La penalización del aborto busca restringirnos de que
podamos decidir sobre nuestro propio cuerpo, un debate necesario que hay que
darlo aunque escandalice a nuestra sociedad.
Recomendaciones
de la CEDAW
En la “Encuesta Nacional de Relaciones Familiares y Violencia de Género contra las Mujeres, realizada en el 2011 establece que 6 de cada 10 mujeres en Ecuador han sido víctima de violencia de Género; una de cada 4 sufrieron violencia sexual en algún momento de su vida.
El Comité de las Naciones Unidas sobre la Eliminación
de la Discriminación contra las Mujeres (Cedaw) hizo recomendaciones al país
para proteger los derechos de este grupo. El documento de 13 hojas establece
acciones importantes para que el Estado ecuatoriano las implemente de forma
inmediata, en resumen:
“despenalizar aborto en caso de violación, incesto y
malformaciones fetales graves o serias; asegurar acceso a métodos
anticonceptivos modernos para todas las mujeres y adolescentes; proveer
información y educación de la sexualidad integral para reducir el embarazo en
adolescentes; asegurar que las leyes tengan una compresión amplia de la salud
en sus tres dimensiones: física, social y mental; respetar la confidencialidad
en los servicios de salud y desarrollar capacitaciones para el personal de
salud sobre secreto profesional; priorizar implementación de Guía de Práctica
Clínica de Aborto Terapéutico.”
*Será que nuevamente se cruzan de brazos las
“feministas” de la “revolución ciudadana”?
Finalmente, la opresión, las desigualdades sociales,
de género, etc., no serán resueltas con la humanización del capitalismo que se
lleva muy bien con el patriarcado.
El Capitalismo refuerza la explotación, permite y
seguirá permitiendo la opresión, acoso sexual, agresiones verbales y
discriminaciones de cualquier tipo contra las mujeres.
Se requiere de una educación política y conciencia de
género en toda la población, en las organizaciones sociales y de mujeres, para
la construcción de propuestas y acciones de lucha por nuestros derechos.
A romper el sin fin de instrumentos ideológicos,
culturales, religiosos, educativos que sostienen la dominación de la mujer para
dejarla compasiva con su situación, es en las calles que debemos reclamar
nuestros derechos y es la mejor escuela de género.
Karla Calapaqui Tapia
Comentarios
Publicar un comentario