La salud en Ecuador está en terapia intensiva y contagiada del COVID19

La emergencia sanitaria por el COVID19 ha develado la crisis en la que se venía debatiendo la salud publica en el Ecuador.

Gobierno tras gobierno han golpeado sectores como salud y educación, con rectores presupuestarios, con políticas que no fortalecen el sistema de salud, ni la prevención, ni el control de enfermedades. 

La salud ecuatoriana ha sido manejada como una empresa privada, no se ha escuchado al personal hospitalario, a los expertos en salud que tienen un trabajo en terreno.  La salud ecuatoriana se encontraba en terapia intensiva y ahora contagiada del corona virus.

Item	2017 En millones de dólares	2018 En millones de dólares	2019 En millones de dólares
Presupuesto para Salud	2.779	3.536	3.104

En cuanto al presupuesto, no se cumple lo dispuesto por la Constitución para asignar el 6% y 4% para educación y salud respectivamente.

Es doloroso e indignante que en medio de esta emergencia, el gobierno de Lenin Moreno y su Ministro de Economía Richard Martínez hayan pagado la deuda externa en lugar de destinar esos recursos a la salud.  Una clara muestra de que al Gobierno le preocupa más los tenedores de bonos, antes que la vida de los ecuatorianos. Las medidas para enfrentar la crisis han sido lentas e insuficientes por decirlo menos.

Según declaraciones del viceministro de Salud (5/04/2020) “más de 1600 médicos y personal hospitalario están contagiados y 10 han fallecido”. Que el personal que está en primera línea este contagiado, es alarmante. No solo se ha puesto en riesgo la vida de médicos, enfermeras, etc, sino también està en riesgo el sistema de salud.

Han jugado con la vida y salud de los ecuatorianos.

El gobierno ha “omitido” las cifras, ha mentido. Cadáveres en las calles de Guayaquil, desesperación, dolor, angustia, agobian al pueblo guayaquileño. Contagiados que no pueden ser atendidos. Hospitales desbordados. Médicos y enfermeras agobiados. Personas que no pueden recuperar los cuerpos de sus familiares.

El perdón del vicepresidente Otto Sonnenholzner, es una justificación a la ineptitud gubernamental y un claro desvío a los problemas que están enfrentando los ecuatorianos. Con mascarilla en mano se ha promocionado en todo el pais, quiere mostrar la imagen de heroe sacrificado mientras que el personal de salud necesita menos Estado de Propaganda y más acciones y recursos.

Es verdad que la pandemia ha golpeado con fuerza a todos los países, pero ¿por qué? El neoliberalismo ha corroído la vida en todos sus aspectos, ha promovido el individualismo, el egoísmo y la indiferencia y, a nombre del libre mercado todo ha querido ser privatizado.

El sector salud ha sido uno de los más afectados con los recortes sugeridos por el Banco Mundial y el FMI. Han desmantelado la salud pública lo que ha provocado reducción de camas hospitalarias, médicos, enfermeras, personal limpieza, etc., y el Ecuador no se ha quedado atrás.

No llegamos a cumplir los mínimos recomendados por la Organización Mundial de la Salud en cuanto a camas hospitalarias, médicos, enfermeras, etc.

                                                                              

Según los últimos datos disponibles de la OMS, solo Cuba (5,2), Argentina (5) y Uruguay (2,8) en Latinoamérica, superan el promedio mundial de camas hospitalarias de 2,7 / 1.000 habitantes.  Para graficar cuán lejos estamos, he puesto a propósito países de Europa, Norteamérica y Asia, y varios latinoamericanos.

Diferentes actores sociales han propuestos alternativas para enfrentar la crisis, pero el gobierno sigue sin escuchar.

El hambre o el corona virus es el dilema de la mayoría de la población ecuatoriana y latinoamericana. Y no, no deberia haber dilema, debe haber garantia de derechos humanos.

¿Qué espera el presidente Lenin Moreno? ¿Acaso que esta olla de presión explote?

Dejen de privilegiar las economías millonarias de los grupos económicos, es hora de salvar la vida de millones ecuatorianos que viven en la exclusión, en condiciones de desigualdad, pobreza y miseria.

La otra cara  de esta crisis, es que pueblo ecuatoriano vuelve a dar lecciones como las de octubre 2019. La solidaridad, el intercambio, el compartir para resistir, la empatía, la acción colectiva, esa ha sido la respuesta de la población. 

Si bien es cierto, diferentes iniciativas privadas se han puesto en marcha para socorrer a los mas necesitados. Iniciativas que han contado con la promocion gubernamental y que pretenden remplazar o cubrir lo que por obligacion le corresponde al Estado 
En contraparte escondidas, sin promocion, estan las acciones comunitarias de poblaciones indigenas, de organizaciones barriales y sociales, de gobiernos autonomos en coordinacion con pequeños y medianos productores para entrega de canastas de alimentos y diversas solidaridades que se han tejido. 

Luego de la pandemia, será es necesario repensar la salud ecuatoriana. Promover la participación social y comunitaria, fortalecer los sistemas de salud, medicina preventiva, atención primaria, medicina familiar, la gratuidad completa de la atención médica. 

Pero también imaginar otro modelo de desarrollo, actuar para acabar con la mayor pandemia que enfrentamos, el capitalismo. Para ello hay que fortalecer la organización social y comunitaria. Los trabajadores y pueblos han demostrado una vez mas que sin ellos no hay riqueza, es la hora.