La evolución de la relación Ecuador y Colombia
La evolución de la relación Ecuador y Colombia
Por Karla Calapaqui
Por Karla Calapaqui
El régimen actual de Rafael Correa ha evidenciado una política de doble faz, un discurso por un lado progresista, en defensa de la soberanía, y por otro lado reafirma el sometimiento a las grandes potencias, a los gobiernos que se alinean con esta política y solo cuando es necesario darse un baño de popularidad y de izquierdismo, visita Venezuela, Bolivia, se abraza con Hugo Chávez y Evo Morales. Ahora, ese mismo gobierno de la revolución ciudadana demuestra abiertamente su servilismo a los grupos económicos, a las transnacionales, al imperialismo y completo se metamorfosea en derechización.
En sus inicios, Rafael Correa condenó la instalación de bases militares en suelo patrio, la salida de los Estados Unidos de la base de Manta, un anhelo del pueblo ecuatoriano, fue una bandera electoral que se cumplió. Interpuso una demanda contra el Estado Colombiano en la Corte Internacional de Justicia de La Haya por fumigaciones aéreas con glifosato; dijo que no se iba a involucrar al Ecuador en el Plan Colombia, se negó a calificar a las FARC como terroristas, incluso llegó a plantearse como mediador para solucionar el conflicto colombiano.
Poco después, el 1 de marzo de 2008, el Ecuador despierta con una terrible agresión a su soberanía por parte de su vecino del nrte. Coherente en su discurso, Correa condenó el bombardeo en Angostura, denunció la violación a la soberanía y rompió relaciones con Colombia. Exigió una investigación para esclarecer esta masacre, sobre todo respecto del ecuatoriano Franklin Aisalla. Rechazó la política de seguridad democrática impulsada por Uribe y denunció la parapolítica. Expulsó a funcionarios de la embajada norteamericana y denunció la injerencia de la CIA en las Fuerzas Armadas y Policía. Ojo que la embajada norteamericana, jamás ha emitido una nota diplomática de disgusto, al contrario, evidencia una tolerancia al proceso de la “revolución ciudadana” y de total colaboración, como más adelante veremos.
En Bariloche, Argentina, cuando Correa asumió la presidencia pro témpore de UNASUR, en su discurso manifestó y condenó la instalación de bases militares en Colombia como una forma de afectar la estabilidad de la región.
Posteriormente, Colombia y Estados Unidos comenzaron a presionar al gobierno de Correa con su supuesta vinculación con las FARC, salieron a la luz los datos que afirmaban esto, cual sombrero de mago, en los discos duros de Raúl Reyes. A la par, el 25 de agosto de 2009, el gobierno de Rafael Correa procedió a la “firma de tres instrumentos bilaterales entre Ecuador y Estados Unidos, con el fin de mantener “los estándares de efectividad en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado”. En estos acuerdos, la DEA (agencia antidrogas de los EEUU, Drug Enforcement Administration) legalizó su trabajo en el Ecuador así como las operaciones conjuntas con la Policía Nacional. (http://www.kaosenlared.net/noticia/ecuador-politica-defensa-gobierno-revolucion-ciudadana).
Esto ya mostró un giro en su política. Varios sectores sociales y populares denunciaron un viraje derechista que se evidenciaba con medidas antipopulares, neoliberales, desarrollistas como la ley de servicio público que eliminó conquistas laborales, que da inestabilidad a los servidores públicos; la ley de COOTAD que permite a los gobiernos seccionales crear impuestos, tasas y la totalidad de las obras por sus beneficiados, etc; la ley de aguas que abre las puertas a la privatización; la ley de hidrocarburos que, al contrario de lo que el gobierno dice, se han festinado los recursos petroleros mediante contratos de prestación de servicios, donde el Estado se reserva apenas el 25% en los nuevos contratos, a las petroleras extranjeras se les exonera del pago de regalías y se les rebaja el impuesto a la renta del 44% al 25%; y un sinnúmero de leyes en contra de maestros, estudiantes, indígenas, trabajadores, etc., en el país.
La cooperación con Estados Unidos, tal como afirmaron sus funcionarios ha tenido sus mejores momentos en el gobierno de Rafael Correa: “tenemos una cooperación admirable en todos los niveles de gobierno. La relación ha sido muy fuerte en todos los niveles y yo diría que, inclusive, ahora estamos viviendo nuestros mejores momentos en términos de cooperación”, dijo Paul Lemke, Jefe del Grupo Militar Embajada de Estados Unidos en el Ecuador.
Y la famosa frase pronunciada por Rafael Correa en la visita de Hillary Clinton el 8 de junio de 2010: “La izquierda a la que pertenezco no es anti nada, ni anticapitalista, ni antiimperialista”, ¡a confesión de parte, relevo de prueba!
Paralelamente, como forma de distracción y de show político para tapar otras cuestiones tanto en Ecuador como en Colombia, salía a la luz la prisión ordenada por un juez en Sucumbíos contra Juan Manuel Santos, ex Ministro de Defensa y sus generales, y paralelamente las pruebas que involucraban al gobierno de Ecuador con las FARC.
La frontera ecuatoriana está vigilada con 16 destacamentos de las Fuerzas Armadas, ubicados estratégicamente en las provincias de Esmeraldas, Carchi y Sucumbíos, con mas de 13 mil soldados. Sumado a esto, actúan 19 destacamentos policiales y un constante equipamiento militar contrainsurgente, lanchas rápidas, visores nocturnos, helicópteros, aviones no tripulados, armamento, etc. Sobre todo, una prioridad es el gasto militar incluido en el Presupuesto desde el 2007 en adelante.
Con esto se han militarizado los 20km. de frontera que establece la Ley de Seguridad Pública aprobada por la Asamblea Nacional como zona de seguridad. Así se estaría dando paso al papel de YUNQUE asignado al Ecuador en el Plan Colombia, tal como lo afirmara el Comandante de la Fuerza Terrestre, Ernesto González: “la misión de las FFAA en la frontera es básicamente de contención, para evitar y contrarrestar las fuerzas insurgentes”.
Adicionalmente, el ejercito ecuatoriano estaría implicado en un caso de falsos positivos. “El Ejército ecuatoriano también aseguró haber dado muerte a tres rebeldes de las FARC el 18 de enero en el río San Miguel, aunque los familiares negaron que fueran guerrilleros.”
Poco a poco, Correa inicia las conversaciones para la reconciliación, asiste a la posesión del nuevo presidente colombiano, y sospechosamente se da el sobreseimiento del mismo por el caso Angostura, teniendo en cuenta que Correa presiona el aparato judicial.
Inicia ya la orden de arriba y los funcionarios del régimen actual empiezan a descalificar a las fuerzas insurgentes colombianas, tachándoles como narcoguerrilla, delincuencia organizada, etc,
Existe ya un silencio cómplice sobre las bases gringas en Colombia, así como sobre la muerte de dos niños ecuatorianos en el bombardeo del pasado 16 de noviembre, cerca de la provincia del Carchi. Acción previa a la reunión de cancilleres y ministros de Defensa de Ecuador y Colombia, en noviembre de 2010.
El 16 de diciembre, en visita humanitaria del mandatario ecuatoriano a su par colombiano por las inundaciones, en rueda de prensa Correa manifiesta que: “Sobre el tema de seguridad, pues bueno hay mucho de qué hablar, pero yo tengo que reconocer que con la administración del presidente Santos ha mejorado muchísimo la presencia del Estado colombiano en la frontera común.
Es una gran ayuda para Ecuador, porque ustedes como periodistas son testigos de los gravísimos problemas de seguridad que teníamos en la frontera norte, por la incursión de grupos irregulares que venían, atacaban y se refugiaban del lado colombiano”. (wsp.presidencia.gov.co).
“Yo creo que esto es pasado (el bombardeo a Angostura). Sin olvidarlo, quedó atrás, ha sido superado por el bienestar de nuestros pueblos”. (wsp.presidencia.gov.co
Esta visita selló definitivamente el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, y a la vez, estas acciones evidencian la derechización del régimen, no solamente en lo político, social y económico, sino también en el involucramiento militar en el conflicto colombiano. A raíz del 30 de septiembre, Correa afianza más esta posición y arremete contra el movimiento popular, mediante su prepotencia y autoritarismo, la democracia se vive con las tanquetas en Carondelet”. Inicia una cacería de brujas y al mismo estilo de sus pares colombianos Uribe y Santos, pone sobre la mesa la recompensa por delación, iniciando en el país la misma práctica con la que se degrada al ser humano.
Al parecer, el gobierno ecuatoriano encuentra más beneplácito por el actual régimen de Juan Manuel Santos, debido a la presencia militar en la zona de frontera, tal como lo afirmará en Ecuadorinmediato, el ex Ministro de Seguridad, Miguel Carvajal, quien “admitió que el gobierno de Ecuador evidencia más presencia de efectivos colombianos en la frontera con el vecino país a raíz del ascenso al poder de Juan Manuel Santos, lo cual ´ha ayudado a la normalización plena de las relaciones con Colombia`.
Adicionalmente a esto, Ecuador mantiene una cooperación constante con el ejército colombiano y ya en la Asamblea Nacional ha impulsado la firma de convenios de cooperación militar con otros países, entre los cuales consta Brasil. Colombia en este aspecto ha ganado terreno y mantiene cooperación militar para operaciones conjuntas con Brasil y Perú. “Las fuerzas militares de Colombia, Perú y Brasil comenzaron este martes operaciones conjuntas en su frontera, que se extenderán por tres semanas, para enfrentar las acciones del narcotráfico y la guerrilla en esa zona, informó la Armada (Marina de Guerra) colombiana”. Agence France-Presse, 23/11/2010.
Según la AFP, esta operación de vigilancia y patrullaje en la zona de frontera de estos tres países se denomina "Colper Amazonia 2010", y participan unidades del Ejército y de la Marina aquéllos. Y evidentemente el objetivo principal es el combate a las fuerzas insurgentes colombianas, aunque aseveren que es la lucha contra el narcotráfico.
El acuerdo con el Brasil, aprobado por la Asamblea Nacional, a más de promover el intercambio tecnológico y científico, permite la colaboración en ejercicios militares. Simple coincidencia?
Así, Ecuador y Colombia, van afianzando la relación a costa de la violación a la soberanía ecuatoriana. Correa vuelve a Colombia con honores y tambores, olvidando el pasado y con una sola hoja de ruta: la derecha.
DIARIO LIBERDADE 2012
Parece un artículo a favor del Régimen solo en el último párrafo se habla tibiamente de su viraje a la derecha; no guarda relación con el título, por lo que se recomienda investigar más datos del reciente apoyo del correísmo al Plan Colombia como la introducción de 13.000 efectivos a para vigilar los 720 km de frontera norte, los aparatos sofisticados de localización, los más de 54000 desplazados, etc. Con cariño Gusvato
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